¿Es un Timo?

La antigua pulserita magnética de cobre de los años 80 parece resurgir de sus cenizas en un formato mucho más moderno y se supone que científico. Ahora se llama Power Balance y dicen que funciona a través de determinadas frecuencias grabadas en unos hologramas que sirven para equilibrar las correspondientes frecuencias naturales de aquel que las utilice. Muchas personas están probando estas pulseras, asegurando que les funcionan estupendamente, a pesar de las burlas de colectivos más críticos.

Pero, ¿qué hay de realidad en este tema? ¿Nos encontramos ante un timo en toda regla o es cierto lo que afirman los fabricantes y distribuidores de la Power Balance? Para empezar no parece que se haya realizado un análisis exhaustivo de esta pulsera, pues la mayor parte de la información de los vendedores es general y hacen inferencias y deducciones atrevidas. Por ejemplo hablan de que en la medicina oriental se utilizan sustancias que se hallan en la naturaleza, como por ejemplo los minerales o los alimentos, para provocar una reacción positiva en el organismo, y a partir de ahí comentan que Power Balance mejora las energías en el biocampo de la persona. Pero esto no quiere decir nada en absoluto, sino que parece buscar que los potenciales clientes deduzcan que la Power Balance cumple los requisitos que exige esta medicina, sin aportar más argumentos en este sentido. También mencionan a Einstein, que decía que todo el Universo resuena en una frecuencia única. A partir de ahí desarrollan su teoría, en un salto mortal del pensamiento, pues no se deduce del postulado de este físico genial lo que ellos argumentan con firmeza.

Luego explican que se graban frecuencias en hologramas, como si una frecuencia se pudiese encajar en cualquier lugar, siendo como es una magnitud que nos dice el número de veces por segundo que sucede un evento. Añaden que la frecuencia del cuerpo humano está entre los 62 y los 72 Hz, pero nadie sabe de dónde se sacan este dato, pues no aparecen estudios conocidos de que se haya realizado ninguna medición al respecto. Sí se conoce la frecuencia de radiación de la actividad neuronal, que va de 0’1 a 30 Hz, y de la radiación electromagnética del cuerpo humano, que es de más de 300 GHz. Pero parece que estos datos no significan nada para los fabricantes de la Power Balance.

También comentan que el holograma equilibra las frecuencias naturales, pero los hologramas son fotos registradas mediante rayos láser, por lo que si no existe otro láser que posea la misma frecuencia no puede leerse. De hecho un holograma no “emite” ninguna frecuencia, y lo que se emitiría nunca serían frecuencias sino vibraciones, sonidos o radiaciones con ciertas características. Podría seguir comentando frase por frase pero, en resumen, si se van analizando todos y cada uno de los argumentos que dan los comerciales de la Power Balance, éstos no aguantan el examen lógico ni coinciden con los conocimientos físicos que tenemos en la actualidad.

Por todo esto podemos concluir al menos que los autores de la información no saben explicarse en absoluto. Si es un timo o no es algo que cada cual debe valorar teniendo la mayor información posible. Las mejores estafas son las que dan la apariencia de seriedad, por lo que no conviene fiarse a priori de nada extraño hasta no valorar suficientemente los pros y contras. Muchas personas utilizan ya estas pulseras y parecen estar contentas con ellas. ¿Efecto placebo? ¿Gusto por imitar a personajes famosos que ya las usan? Entra en la página powerbalanceshop.es, en foros como foromtb.com, mediavida.com o foros.menshealth.es y decide por ti mismo.